En la Argentina las importaciones de fertilizantes fosfatados –el país debe traer del exterior el 100% de ese insumo– siguen afectadas por la demora en la tramitación de permisos de importación. Esto se debe a que el Gobierno, a través del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), mantiene el “cepo” cambiario para importadores ante la escasez de divisas.