La seguridad en el agro y su impacto en la red de distribución de agroquímicos

Desde el año 2020 a la fecha, han ocurrido una serie de hechos delictivos en el sector agropecuario, entre ellos ataques a silos bolsas, incendios, robo de cereales, maquinaria y de agroquímicos tanto en establecimientos rurales como en depósitos de distribuidores que después circulan en el mercado “negro”. Los valores siniestrados en fitosanitarios importan cuantiosas sumas de dinero. Las bandas delictivas han generado “inteligencia del robo” dado que el “botín” ya tiene asegurado su destino.

En la última encuesta realizada por CEDASAC abordamos el tema de la seguridad y las medidas implementadas por el canal de distribución. En el gráfico de abajo, observamos una incidencia de inseguridad del 20.8% (n=48).

A continuación presentamos las medidas que se vienen llevando cabo en el distribuidor para intentar mitigar estos sucesos delictivos (siniestros y robos).

Como vemos en el gráfico, la mayoría de las empresas disponen de un servicio de sistemas de alarmas y de cámaras, y un 54% de quienes respondieron la encuesta, poseen protocolos de seguridad. No obstante eso, los distribuidores protegen su capital también mediante coberturas de seguros. En el siguiente gráfico,  vemos el impacto de contratación de coberturas de seguros. Más del 75% de los distribuidores contratan seguros.

En el gráfico 4 se muestran los tipos de seguro contratados por los distribuidores. Se observa que el seguro de incendio y de robo fueron los de mayor contratación en cuanto a su tipo.

En el último gráfico compartido, podemos visualizar los resultados de la encuesta en referencia a las empresas de seguros contratadas por los distribuidores. La Segunda y Sancor fueron las de mayor predilección por este canal.

Por nuestra parte y para cerrar este artículo, es nuestra intención reiterarle nuestras sugerencias para minimizar efectos de robos:

• Extremar el manejo de la información, la confidencialidad y la exposición.
• Tomar medidas de seguridad estrictas.
• Actualizar la tecnología aplicada en seguridad (alarmas y dispositivos).
• Definir un programa interno: personal dedicado a custodia, la logística controlada de ingreso y egreso, horarios permitidos de carga y descarga.
• Cadena de mando y autorizaciones definidas con claridad en la empresa/depósito.
• Control de la documentación adjunta del remito de ingreso, lotes y partidas.
• Personas autorizadas al ingreso y lugar de permanencia durante carga y descarga.
• Mejorar las coberturas de seguros.
• Comunicación con policía y/o la justicia interviniente.